Sabor a poco: Vélez 1 - 1 Estudiantes

El empate ante Estudiantes dejó una mala imagen del equipo de Gareca. El Pincha impuso su juego a base de mucha presión en el medio, solidez defensiva y pelotazos para Duvan Zapata, el potente delantero. Vélez pocas veces pudo superar esos obstáculos que puso el rival ni logró imponer su juego. A pesar de esto, el empate se produce por errores y desatenciones defensivas.

Cuando un rival juega como lo hizo Estudiantes es imperioso tener movilidad, precisión y velocidad. El Pincha permitía que Vélez maneje la pelota en defensa, pero en cuanto Desábato o Romero intentaban armar la jugada la férrea marca les impedía jugar la pelota con precisión. Insúa, el más movedizo en el frente de ataque, no lograba asociarse. Bella y Copete estaban estancados en sus bandas o se cerraban cuando la jugada reclamaba gente por afuera. A Rescaldani se lo vio ansioso, queriendo callar el murmullo que aparece en el Amalfitani cada vez que toca una pelota. Así el 9 se chocó varias veces con Copete y cometiendo varias faltas a los defensores. Por los laterales, Peruzzi y Papa intentaban proyectarse, pero no lograban controlar el balón o hacer bien pases cortos. Y los volantes pinchas le ganaron las espaldas durante todo el primer tiempo. Encima, el sólido triángulo defensivo que formaron Sosa-Cubero-Dominguez mostró su versión más floja. El uruguayo tuvo algunas salidas en falso en los centros, mientras que la dupla de centrales perdió casi siempre ante el físico de Zapata. Así las cosas, terminar el primer tiempo empatados en cero era un buen negocio.

El desgaste que hicieron los dirigidos por Cagna en el primer tiempo era imposible de mantener los 90 minutos, por eso en el inicio de la etapa complementaria Vélez fue superior. Desábato se afirmó en el medio, recuperando y jugando, a la vez que Romero se soltó más en ofensiva y se encontró con Insúa. Peruzzi tomó confianza y fue de lo más peligroso encarando por derecha. Lamentablemente, ni Bella ni Copete ni Rescaldani entraron en ese circuito de juego. Iván fue reemplazado por Brian Ferreira, mientras que los delanteros quedaron en cancha por la falta de variantes que tiene Gareca en el banco. Las lesiones hacen que Cáseres sea el delantero que deba ingresar para cambiar la historia de un partido, y es muy difícil para un chico lograr eso. A pesar de ser superior, Vélez no generaba demasiado riesgo para el arco de Silva. La incapacidad de crear situaciones de riesgo está ejemplificada en el gol de Insúa, en el que Dominguez debió romper el mediocampo rival para asistir al Pocho. Poco duró la alegría. Estudiantes empató con una jugada que debe haber sido inventada por la Bruja Verón padre. El tiro libre mitad centro, mitad tiro al arco es algo que parece muy sencillo de evitar pero poco practicable. Ante un rival como el Pincha, cuya mayor virtud son las pelotas detenidas enviadas por Benitez, en busca del arco o de la cabeza de Desábato o Angeleri, parecería ser más sencillo marcar en zona, ocupando los lugares donde es más factible que caiga el centro y darle espacio al arquero para adelantarse y salir a cortar el centro. Tendrá sus motivos Gareca para sostener una marca al hombre, en la que Vélez pierde seguido.

El empate final fue justo. Incluso, pudo ser derrota del equipo fortinero. A un pasito de avanzar de ronda en la Copa surge la incertidumbre de qué hacer en el torneo local. Son nueve los puntos que distancian a Vélez del líder Lanús, pero quedan 13 fechas por delante. Sin dudas que la Libertadores es el gran objetivo, la cuestión será cuánto arriesgar en el Torneo Final. Luego del receso por Eliminatorias los rivales serán River y San Lorenzo. En el medio, el viaje a Chile para concretar el pase a octavos. Imaginando a todos los titulares recuperados (obviamente exceptuando a Cabral, sin confirmar Tobio), ¿quiénes jugarán esos dos duelos claves para las aspiraciones fortineras en el ámbito local? Cualquiera sea el equipo, deberá mejorar mucho en el rendimiento para seguir adelante en cualquiera de los dos frentes.

Por Alejandro Germino (@alegermino en twitter).