El Jorge Guinzburg que yo conocí

Era flaquito. Practicaba artes marciales, era ágil, y siempre bromista y dicharachero.
Vivíamos en el mismo barrio, nos conocíamos de siempre, ya de más grandes, compartíamos el mismo colectivo, el 106, él iba a la Revista Satiticon que recién comenzaba; yo a estudiar, él lo tomaba una parada antes, me esperaba, si era Lunes, el tema era infaltable… lo que hubiera acontecido en el partido…
Vélez, formó parte de su vida, de sus alegrías, de su lucha, siempre lo vi optimista, una pasión como pocas veces visto…
Compartir con el Club tantas Glorias, fue una de sus alegrías, que la vida le dejó.
Como amigo, jamás dejó de venir al barrio, de recorrer sus calles y visitar al los que siempre estuvimos.
La fama, trae olvidos, pero con él no fue su caso… Siempre estuvo atento, y solicito, y siempre de Vélez, compraba las revistas para informarse, en el quiosco de la parada de colectivo, las prestaba y las compartíamos en el viaje… siempre ávido de noticias del Club.
Me siento afortunada de haber compartido esa etapa de “Un Gran Hincha de Vélez”. Después vino su propia Gloria, en un corazón totalmente fortinero…
Y desde el palco del cielo, nos está alentando…
Gracias Jorge, por todo. Siempre en nuestro recuerdo...

Por Mama Fortinera - Camille Cavs.