Partidas que duelen

A la ya conocida salida de Zapata, esta semana se agregaron las bajas de Barovero y Ortiz. Tres casos de no renovación de contratos, cada una con un matiz distinto. El caso de Zapata se vislumbraba desde las últimas fechas del torneo pasado. Si bien el Chapa tenía rendimientos buenos casi nunca terminaba los partidos. Su puesto es donde más recambio hay, tanto en calidad como en cantidad. 

Las preocupaciones aparecen con Ortiz y Barovero. El Tano tuvo algunos rendimientos altos y otros bastante bajos. Son recordadas algunas expulsiones sin sentido en partidos importantes. Los rumores marcan que Ortiz pretendía renovar por dos años, mientras la dirigencia quería hacerlo por uno. Una lógica postura de parte de los dirigentes si se tiene en cuenta que es un jugador que está llegando a los 35 años. Cuando se confirmaba la salida, Gareca explicaba que ningún jugador tenía asegurada la titularidad y Ortiz explicaba que, a su edad, necesitaba jugar.

Mucho más complicado es el tema de Barovero. El arquero fue fundamental en las últimas campañas. Junto con Augusto Fernandez uno de los puntos más altos del último semestre. Pero aparece nuevamente la imagen del representante. Esas personas que lucran con los jugadores y sus pases. Basándonos en las versiones oficiales, luego de negociaciones, idas y vueltas, se llegó a un acuerdo pero al momento de firmar Váttimos, representante de Barovero y dueño del 50% del pase, cambió de opinión. La comisión directiva, representada por Calello, dio por finalizadas las negociaciones. El club no puede ser rehén de las especulaciones económicas de estas personas. Cuando hace años el club dispuso dejar de negociar ventas o compras a través de intermediarios, fue reconocido por todo el ambiente futbolístico. Una vez más, da el ejemplo de cómo cortar con éste mal que afecta al fútbol argentino.

Seguramente, éste recambio y decisión de no hipotecar el club a futuro, tenga grandes costos políticos. La gran duda que queda, es si vale la pena este esfuerzo. Al ver como clubes con cientos de millones de pesos de deuda incorporan sin sufrir sanción alguna. Quizás, algún día se cumplan las reglas y aquellos clubes con semejantes deudas, serán sancionados.

En Vélez continuamos la línea que enseñó Don Pepe Amalfitani. El orden y el respeto ante todo. Como siempre, la opinión de socios e hinchas estará dividida. El último campeonato económico se valoró unos cuantos años después de ganarse. Al llegar los logros deportivos. Esperemos que esta vez no lleve tanto tiempo.

Por Alejandro Germino (@alegermino en twitter).