Desde la Platea Norte: la toma de Estudiantes

Estudiantes jugó, como hace años viene haciendo, a tirar centros, aprovechando que Aguerre empezó medio nervioso y con menos salida que estudiante de arquitectura el fin de semana previo antes de entregar una maqueta, aunque después mejoró en el segundo tiempo y tapó un gol hecho.


El mediocampo no anduvo tan fino como los últimos partidos. Cerro estuvo lento como dedicatoria de velas en cumpleaños de 15. Allione apareció menos que los políticos en programas de debate cuando no hay elecciones.


Los delanteros jugaron bien, pero no llegaron a concretar, o se encontraron con un Rulli impecable. Pratto quiso meter un par de cabezazos pero tuvo menos puntería que borracho jugando al tetris. Zárate hizo varias veces la misma jugada, ir por la izquierda, enganchar y pegarle con la derecha, pero ya era más predecible que melodía de Tan Biónica.


Con Estudiantes jugando siempre al pelotazo, hoy hubiera sido un buen partido para el ídolo de la gente, la torre de Liniers, el genio de los festejos extraños de gol, Ezequiel Rescaldani y su metro noventa.



@PlateaNorteCAVS