Méritos inconclusos: Vélez 1 - 1 Independiente

Que Vélez no anda de liga es una apreciación notoria que ya hemos tratado en otras oportunidades. Sin embargo, es claro que su tendal de mala suerte sigue haciendo de las suyas, tal como quedó demostrado en el último partido frente a Independiente. El Rojo golpeó en la red en la única chance a fondo que fabricó en todo el encuentro y Vélez debió conformarse con un punto mínimo en comparación con el dominio del que gozó a lo largo del trámite.
Es cierto que cada centro que cae en el área de Vélez tiene altas chances de terminar en gol o sobresalto serio.

Ese es el punto más notorio a mejorar. Este viernes, Augusto Fernández, Cubero, Domínguez y el mismo Barovero, que no atraviesa un presente de máxima seguridad, dieron fe de ello, cuando conjuntamente propiciaron el gol rival que echó por tierra el trabajo de 90 minutos. Pero también es verdad que en general no se pasaron sustos, que la dupla Cerro-Cabral rindió, que los centrales despejaron el resto del peligro, que Cubero siguió aportando en su faceta ofensiva y que Augusto fue figura. Apenas Canteros sembró dudas por su conocida displicencia, que parece no haberse disipado tras su paso por el banco. Y, si se reemplaza “Canteros” por ”Martínez”, la frase anterior continuará teniendo sentido.

Sería injusto entonces hurgar mucho más buscándole flaquezas al grupo, cuando se estuvo a centímetros de una victoria que nos habría motivado a hablar ahora de una gran reacción, solidez y perseverancia. Contra Independiente, Vélez tuvo todo para ganar, menos ese gol que el presente le viene mezquinando. Los méritos, demasiado seguido, quedan inconclusos en el marcador. Y mientras tanto, Boca se escapa.

Por Marisa Pontieri (TyC Sports).