Punto y aparte: Vélez 0 - 0 Boca

Poca tela para cortar en lo que nos atañe, el nivel de Vélez y sus vaivenes, dejó el empate con Boca. Es que, si para el Fortín el resultado no fue visto con tan malos ojos teniendo en cuenta que las fuerzas están volcadas al plano continental, qué decir entonces de lo que significará para el rival, que desde el vamos apostó por el punto y dejó en claro cuánto le gustaba la igualdad. Discusión aparte sobre si ésa es la actitud que le corresponde tomar al Xeneize acorde a su historia, lo cierto es que por la ventaja que dispone en la punta es entendible.

Tampoco el Fortín, cauto, se decidió a apretar el acelerador a fondo. Desde el principio, cuando se decidió dejar en el banco a Augusto o Franco. Después, eso sí, la concentración alcanzó un buen piso y el equipo intentó hacer aquella medialuna con la pelota del semestre pasado, alternando bandas hasta encontrar el hueco para desnivelar, sólo que no alcanzó con el Burrito aún algo falto de ritmo para romper la defensa o un Bella demasiado errático y terminó cayendo en el desborde obligado, con centros que en Rescaldani tampoco encontraron una torre para opacar a los centrales visitantes.

Así las cosas, el desahogo de la tarde se volcó al gran aporte de Montoya y a las extrañas decisiones de Baldassi. Y alcanzó para que quede claro que aún con ausencias -Boca no era el único que las tenía-, Vélez posee material para mantener a salvo el orgullo. Aunque falte fútbol y la cabeza sólo esté puesta en el jueves.

PD: Buena suerte a la nueva conducción, que siga con los éxitos futbolísticos, priorice los refuerzos y la continuidad de Gareca, que Grondona no le pase factura y que, por supuesto, no olvide que el club es de todos y mucho más que fútbol.

Por Marisa Pontieri (TyC Sports).