Sin más margen

Superada la angustia vivida en Vélez por la salud de Iván Bella, se puede retomar el camino del análisis y reflexión futbolística, de cara a lo que viene.

Los últimos resultados han generado una situación casi límite, poco común en el período que Gareca lleva al frente del club. Es que la decisión del cuerpo técnico, respaldada desde el inicio por la gran mayoría del pueblo fortinero, era dedicarse de lleno a la Copa Libertadores aunque sin descuidar el torneo local. Algunos malos resultados y una seguidilla increíble de lesiones, obligaron a repetir formaciones suplentes en el Torneo Final, dejando al Fortín lejos de la pelea. Por eso cambió el “segundo objetivo” del semestre y los titulares fueron a Catamarca para jugar la Copa Argentina.

La derrota ante un mix de titulares y suplentes de Olimpo, fue un golpe duro y un llamado de atención. Fue entendible ir con lo mejor que había disponible, ya que la Copa Argentina da un lugar para la Libertadores del año próximo, y Vélez podía ganarla en cinco partidos. Fueron noventa minutos malos, en los que casi no se generaron situaciones de riesgo. Algo muy parecido a lo que se vio en el último encuentro ante Emelec, para aquellos que sospechan de la honorabilidad de los jugadores fortineros. El mejor Vélez, mostró dos caras muy feas en estas presentaciones. Muy lejano de aquellas actuaciones ante Peñarol, tanto en Montevideo como en el Amalfitani (para ejemplificar con rivales de peso, porque también fue muy bueno lo hecho en Chile). Es claro, Vélez tiene por delante la Copa Libertadores y nada más. Habrá que esperar que el mal de las lesiones se aleje, que vuelvan los rendimientos mostrados ante el conjunto charrúa y confiar en que el principal objetivo del semestre puede cumplirse.

Pero pensando más allá, viendo el 2014, hay otro tema. La clasificación a la Libertadores del año mundialista se complica. Obviamente, ganar el certamen este año sería la forma ideal de clasificarse. En cuanto a la tabla general del fútbol argentino, ya se ve difícil, por la floja campaña en el torneo local. Claro, que de ganar el Torneo Inicial en el próximo semestre la clasificación estará, pero a pesar de haber obtenido tres de los últimos ocho campeonatos se sabe que ganar el título argentino no es sencillo. La última posibilidad pasaría por ganar la “Súper Final” contra el campeón de este campeonato, clasificar a la Copa Sudamericana y ser el mejor argentino. Algo por demás rebuscado y complejo.

Es pensar en tiempos que parecen muy lejanos, pero hemos aprendido, a base de golpes muy duros, que debe proyectarse a futuro con responsabilidad y criterio. Es imperioso mejorar en el campeonato local, pensando en la tabla anual general. Pero lo más importante es recuperar el nivel, para seguir luchando y avanzando en la Copa Libertadores.

Por Alejandro Germino (@alegermino en twitter).