De la mano del Turu

José Flores debutó como entrenador y lo hizo de la mejor manera. Un partido y una copa más que agrega a la amplia vitrina del Fortín. Manteniendo un estilo de juego, el Turu empieza a imponer su sello en un equipo ganador.

Habla claro, sencillo y de fútbol. No solo continúa el estilo de Gareca dentro del campo de juego, sino también afuera. No le dedica tiempo a las chicanas, a las protestas, ni busca la complicidad de la prensa para ganar elogios. Tras su debut oficial, y su primer título como entrenador, Flores hizo un claro análisis del triunfo del Fortín demostrando, a pesar de la subestimación de muchos a sus cualidades como técnico, que entiende el fútbol tan bien como lo jugaba.

“Este título también es de Gareca, llegamos acá gracias a él” fue una de las primeras frases que dijo tras la victoria. A pura humildad, el técnico reconoce que poco pudo cambiar en este mes de trabajo y que mucho tiene que ver el trabajo realizado a lo largo de los cinco años del ciclo anterior. Explicó las dificultades para manejar correctamente la pelota en un campo de juego “duro abajo pero mojado arriba” sumado a un intenso viento que complicó mucho, especialmente en el segundo tiempo con el pelotazo frontal. Uno de los cambios más notorios fue la intensión de salir jugando desde el arco, incluso arriesgando mucho en algunas ocasiones. También lo explicó de forma sencilla “tenemos un equipo de buen pie y nos beneficia salir jugando, cuando se revolea para arriba la pelota vuelve muy rápido”. En cuanto a las sensaciones tras esta nueva consagración, explicó las diferencias que sintió viviendo los triunfos como jugador, ayudante y técnico “Son sensaciones distintas y la verdad que me gustó, es un sentir muy lindo haber sido campeón como entrenador”. Y agradeció el cariño de la gente.

Sostiene que va ir agregando detalles personales al estilo de juego. Ya se notan algunos cambios, como el enroque de los centrales (Dominguez por derecha y Tobio por izquierda), al igual que se vio un equipo más vertical que en la era Gareca. Quizás de a poco deje de ser “El Turu” ese gigante de gambeta prodigiosa, para transformarse en “Flores” un entrenador que se hizo cargo del equipo en una situación que no era sencilla, para renovar al club tras uno de los ciclos más exitosos de su historia.

Por Alejandro Germino (@alegermino en twitter).